Fui como un ángel caído preso de mi libertad, hasta que te conocí por esas calles. Fue porque quiso el destino que te pudiera encontrar y hoy no sé como seguir cuando no estás. Te agradezco que sanes mi alma, sobrevivo encontrando en tus ojos el resplandor de un verde talismán. Si al final esta vida es un sueño sólo sé que a tu lado me quiero despertar, amanecer una vez más. Sabes, cuando era muy joven nunca pensé que el amor me daría sin preguntar tantas respuestas. Y hoy me fío de pocos y hoy que reina la traición se que alguien puede curar mi corazón -
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)





No hay comentarios:
Publicar un comentario